En la inmensidad del Bosque de Chapultepec, entre un universo de árboles, en la rama más olvidada arraigada al suelo estaba ojo de árbol más bonito que haya visto
En la inmensidad del Bosque de Chapultepec, entre un universo de árboles, en la rama más olvidada arraigada al suelo estaba ojo de árbol más bonito que haya visto